Probablemente dentro del campo de la salud, ningún área está tan afectada por el engaño, el error y la falsa información como la de la nutrición. Continuamente caemos en el error de seguir “dietas milagrosas”, dejamos de consumir diversos alimentos o nos da por consumir otros a los que se les atribuyen propiedades “milagrosas o curativas”… Conoce algunos de los mitos y errores mas frecuentes en nuestra alimentación y evita caer en ellos de la mano de Nervión y Triana al día.
A lo largo de la historia ya sea por causas políticas, religiosas o culturales, se han creados numerosas creencias y mitos en torno a muchos alimentos, siguiendo el refranero castellano vemos reflejada esta idea cuando se afirma que “de lo que se come, se cría”. Lo sorprendente es que aún persisten muchas de las creencias primitivas, más o menos modificadas, a pesar de haber sido desmentidas y desautorizadas por la comunidad científica. Algunos ejemplos de estos mitos o errores son:
– La sal engorda. (No engorda, pero favorece la retención de líquidos y aumenta el riesgo de enfermedades relacionadas con la hipertensión).
– Los plátanos engordan y tomados con otros alimentos engordan todavía más. (Contiene más calorías e hidratos de carbono que otras frutas, pero en dietas de adelgazamiento aportan sensación de saciedad y numerosas vitaminas y minerales).
– El pan tostado adelgaza. (El pan tostado contiene las mismas calorías que sin tostar, únicamente se elimina el agua).
– Miel antes que azúcar. (Al atribuírsele a lo largo de la historia numerosas propiedades curativas y beneficiosas para el organismo, se suele abusar de ella para edulcorar y sustituir al azúcar, sin embargo muchas de estas propiedades no están demostradas y la realidad de la miel es que posee un elevado contenido calórico y pocos nutrientes).
– Los productos Light no engordan. (Por muy light que sea el producto, si se consume en abundancia engorda y este es un error que solemos cometer, por el simple hecho de que la etiqueta del producto nos indique que es Light).
– Las aceitunas están totalmente prohibidas en las dietas de adelgazamiento (Esto es falso, ya que se pueden usar sustituyendo al aceite de oliva en las ensaladas).
– Pepinos y manzanas tienen “calorías negativas” ya que exigen para su masticación y digestión más energía que la que el alimento proporciona.
– Es preferible consumir margarina en lugar de mantequilla. (La margarina se hace a base de aceite vegetal hidrogenado, esas grasas artificialmente sólidas se conocen como “grasas trans”, que han demostrado ser mucho más perjudiciales para la salud que diversas grasas de origen animal).
– Naranja y leche no deben consumirse juntas, porque la leche “se corta” (se coagula). (La leche se coagula siempre que alcanza un medio ácido, que es lo que sucede cuando llega al estómago y esto es imprescindible para su digestión).
– El queso es excelente para una dieta de adelgazamiento, por su elevado contenido proteico. (Pero depende del tipo de queso, ya que hay quesos muy grasos. Generalmente un 75% de la energía total procede de la grasa y sólo un 25% de la proteína).
– Para perder peso, es bueno saltarse alguna comida. (Todo lo contrario, el saltarse comidas nos provoca más apetito a lo largo del día y sobretodo al final. Personas que dejan pasar mucho tiempo entre 2 comidas, poseen metabolismos mas bajos y queman menos calorías).
– Para estar bien nutridos hay que tomar suplementos vitamínicos. (Los suplementos pueden ayudar en caso de necesidad o deficiencia, pero una dieta variada y equilibrada aporta los nutrientes, vitaminas y minerales que necesita el organismo).
– Se debe beber menos si se pretende perder peso. (Es fundamental beber al menos 2 litros de agua al día, la hidratación del organismo mejora el funcionamiento de los riñones y aumenta la capacidad de desintoxicación y defensa).
– Cuando se come menos, el estómago reduce su tamaño (el tamaño del organismo depende de nuestra genética, por tanto el organismo no crece o decrece en función de si en un momento dado se come más o menos).
– Las dietas milagrosas existen. (La mayoría de estas dietas proponen que la ingesta energética sea muy inferior al gasto energético total. Por tanto se produce un grave desequilibrio en la proporción de macronutrientes (glúcidos, lípidos y proteínas) y una carencia importante de micronutrientes (minerales y vitaminas).
La Organización Mundial de la Salud (OMS) asegura la alimentación es el arma más poderosa para preservar la salud y prevenir el riesgo de enfermedades de todo tipo. No cometas más errores y que no te engañen, sé consciente que la ingesta de alimentos y nutrientes de manera equilibrada, se convierte en la clave para garantizar la salud y el bienestar (físico y psicológico).
