El Hospital Universitario de Valme de Sevilla ha recibido recientemente un doble reconocimiento científico por la aplicación de una técnica de diagnóstico por la imagen para detectar cáncer de mama, la mamografía digital con realce de contraste (CESM, de sus siglas en inglés Contrast Enhanced Spectral Mammography).
Esta técnica destaca por su elevada resolución para la detección de lesiones potencialmente malignas, junto a la valoración de la extensión de las mismas permite que esta técnica complemente las prestaciones de la mamografía convencional, según ha informado la Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales a Europa Press.
El esfuerzo realizado por los profesionales de la Unidad de Gestión Clínica de Diagnóstico por Imagen de este Hospital sevillano para implantar dicha herramienta dirigida al diagnóstico de una enfermedad, catalogada como la primera causa de muerte por cáncer en el sexo femenino, ha obtenido un premio en el XV Congreso de la Asociación de Radiólogos del Sur.
Simultáneamente, estos profesionales han obtenido otro galardón en el I Congreso de Mama organizado por las principales sociedades científicas internacionales ligadas de forma monográfica a esta patología, la Sociedad Española de Senología y Patología Mamaria, la Sociedad Española de Diagnóstico por la Imagen de la Mama y la Sociedad Iberoamericana de Diagnóstico por Imagen de la Mama.
Ambos trabajos científicos, coordinados por el especialista Fausto Rubio, se centran en la comparación de las técnicas diagnósticas para esta patología en cerca de un centenar de mujeres con sospecha de cáncer de mama. Los resultados confirman una mayor sensibilidad de la mamografía con realce de contraste que la mamografía convencional y similar a la resonancia magnética.
La mamografía digital con contraste está indicada para el estudio de cánceres diagnosticados o con sospecha, para la valoración de nódulos cuya sospecha diagnóstica no está despejada mediante la mamografía convencional y la ecografía, y además para el estudio de mamas densas cuyos tumores no se palpan y pueden estar ocultos. Su aplicación no solo permite diagnosticar tumores malignos, sino que aporta una completa información clínica, tamaño del tumor, morfología y presencia de múltiples focos en la mama afectada o en la otra. También se ha mostrado útil en la diferenciación entre cicatriz y recidiva tumoral en mujeres intervenidas de lesiones malignas con cirugía conservadora.
R.N