Si alguien ha amado la cerámica ese ha sido Vicente Carranza. El coleccionista, Trianero adoptivo, ha fallecido este miércoles en Madrid.
Manchego de nacimiento y trianero de adopción -oficialmente- desde 2010, Carranza ha fallecido a los 90 años. El coleccionista de Daimiel (Ciudad Real) poseía la mayor colección de España de azulejos y objetos cerámicos. Para su disfrute, Carranza la cedió para que fuera expuesta en cuatro espacios: en el Museo Comarcal de Daimiel, su pueblo natal (desde 2005), el Palacio de Santa Cruz en Toledo (desde 2001), el Real Alcázar de Sevilla (desde 2010) y el Centro de la Cerámica de Triana (desde 2014).
Su faceta de coleccionista no es la única que lo coloca como un amante de los barros vidriados. También era un minucioso estudioso de la cerámica y un divulgador de este tipo de expresión que cabalga entre la artesanía y el arte. En 2010 recibió la Medalla de Oro de la Ciudad de Sevilla, y ese mismo año fue nombrado Trianero Adoptivo en la entrega de galardones de la Velá de Santiago y Santa Ana con la que el arrabal reconoce a los que aman Triana.
La mejor colección cerámica de España
La llamada Colección Carranza es una suma de piezas relacionadas con los barros vidriados única en el mundo. En este compendio construido año a año por Vicente Carranza la cerámica sevillana y, en especial trianera, tiene un papel importante. Estamos hablando de la mayor colección de cerámica de Triana del mundo.
Una buena parte de esta colección la acogen los nobles muros del Alcázar de Sevilla. Allí, esta parte de la colección muestra lozas y azulejos que abarcan desde el siglo XII al XVIII, pasando por la época mudéjar, la cerámica musulmana, renacentista o barroca. Cedida para ser expuesta en el palacio real hispalense por 20 años, será en 2028 cuando sus herederos deban decidir si se prorroga esta cesión.
En cuanto al Museo de la Cerámica de Triana, las piezas cedidas por Vicente Carranza fueron expuestas a partir de 2014. En esta parte de la colección que se exhibe sobre los antiguos hornos de Santa Ana, hay piezas de maestros trianeros como Arellano o Valladares, entre otros.