A pesar de las altas temperaturas características de estas fechas y de tratarse del último fin de semana de agosto, en el que muchos vecinos apuran su periodo de vacaciones hasta el final, la Parroquia de San Gonzalo experimenta una gran afluencia de público que desea participar en el besamanos de la Virgen de la Hermandad.
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La cola para acceder al templo se extendía hasta el principio de la acera de la plaza. Aproximadamente 20 minutos se tardaba en entrar. A las 14:00 horas ha cerrado la parroquia y reabre sus puertas a las 17:00 horas para que continúe el besamanos hasta las 21:00 horas.
Javier Fernández Maeso
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