¿Recordáis el Colegio de las Barandas de la barriada La Dársena? Esta semana en Triana al día nos hemos propuesto traértelo a la memoria a través de esta fotografía. Investigando en las páginas y páginas que hablan sobre nuestro barrio, descubrimos como el periodista Emilio Jiménez Díaz, comenzó al final de la década de los 70 unas publicaciones el diario ‘Nueva Andalucía’ denunciando los problemas sociales del barrio de la época. Aquí te traemos informaciones extraídas de sus estudios en las que recordamos cómo era la situación de los escolares trianeros de entonces.
Bajo el lema «Esta es la Triana que no se ve desde el puente», este periodista hace un recorrido minucioso por el barro de La Dársena, donde se ubicaba el colegio de la foto. «La Triana apartada de carteles turísticos y agencias de viajes tiene muchos problemas y, lo que es muy importante, enormes deseos de superarlos», asegura el autor .
Cuando se cerró el grupo escolar de La Dársena, que tenía una población de 136 niños en edad de escolarización, tuvieron que sufrir el periodo de adaptación en otros grupos escolares nacionales (San José de Calasanz, Elena Canel y José María Izquierdo), amén de grupos particulares: Salesianos, Protectorado, etc., con el consiguiente problema de acoplamiento y distancias. Éste, nuevamente, es otro de los problemas que se le plantea a los habitantes de La Dársena: el traslado a otro sector donde no se ha tenido en cuenta la población en edad escolar y, lo que es peor, la cantidad de niños que irán sumándose anualmente.
Emilio Jiménez cuenta que en aquel momento en La Dársena vivían un total de 275 familias, en condición de renta, contando con 136 niños en edad escolar, mencionados anteriormente. A las pequeñas y humildes construcciones en las que vivían estas familias que más tarde fueron desalojadas para construir edificios, este periodista las describe así:
Sus viejos y calurosos techos de uralita y su formación baja de casitas de una sola planta, contrastaba fuertemente en un paisaje crecido en pocos años, lleno de torres de once pisos.
Otro de los testimonios sobre la barriada, lo extraemos de Manuel Hidalgo Ortega, que recuerda cómo fue la barriada en los años 30:
En los años treinta cuando se habitó la Barrriada, fué considerada como viviendas muy dignas y no carentes de favorable comparación con las muy habituales de la época, tales como Corrales de Vecinos, Partiditos etc. También, en los 15 o 20 primeros años, contó con dos colegios públicos, para niños y niñas, de los que salieron muchos con sólido nivel básico. Entre su vecindad, mayoritariamente obrera, contaba asimismo con funcionarios municipales, administrativos de empresas y de la banca, militares, profesores de enseñanza, artistas orfebres, industriales mencionados y otros, e incluso, un famoso torero de la época conocido por «Torerito de Triana».
La imagen: Joaquín Fernández Baena y la hemos tomado del grupo de Facebook: Fotos Antiguas de Sevilla
Fuente: www.desdemitorrecobalto.blogspot.com.es
Laura Liñán