Tal y como ha publicado ABC, sobre el asunto de supuesto pedófilo de 38 años dueño de un cibercafé en Triana, los padres de una de las presuntas víctimas se han ratificado esta semana en la denuncia que habían presentado contra la madre de Francisco Javier. R. P. por un delito de obstrucción a la Justicia. Y es que, como asegura este periódico, la madre del acusado ofreció dinero a los padres de las víctimas para que retiraran la denuncia.
Al parecer, la madre del acusado, tras defender públicamente a su hijo, le ofreció hasta en cuatro ocasiones un acuerdo económico a cambio de que ellos retiraran la denuncia. Recordamos que éste se enfrenta a una pena de 16 años de cárcel solicitada por la Fiscalía, ya que se le acusa de tocamientos a tres menores de entre nueve y trece años.
Otro de los motivos por el que los familiares de las víctimas han ratificado denuncia es que se han visto abordados y perseguido en numerosas ocasiones por la madre del supuesto abusador: «no querer salir de casa y a evitar los sitios que frecuentaban antes por el barrio para no encontrarse con esta señora». Y aclaran que nunca aceptaron ese acuerdo económico y que evitaban al máximo a la individua, por ello, han pedido como medida cautelar una orden de alejamiento.
Por otro lado, el letrado que representa a dos de las tres víctimas ha vuelto a pedir al titular del juzgado de Instrucción nº 2 de Sevilla que envíe a prisión al acusado a la espera de juicio, dada la gravedad de los hechos de los que se le acusa. Además, el imputado violó la orden de alejamiento a pocos días de quedar en libertad, ya que se acercó a uno de los niños. Estuvo de vuelta en la cárcel unas semanas más y desde principios de año está libre.
Recordamos que la detención se produjo el pasado 4 de octubre, cuando la Policía Nacional recibió una llamada alertando de que había varias personas alteradas en la puerta del cibercafé propiedad del arrestado. Las madres de los menores víctimas de los abusos buscaban al dueño del negocio después de que sus hijos les relataran que éste llevaba abusando sexualmente desde mayo de 2014. El hombre reconoció a la Policía haber realizado algunos tocamientos a los tres menores en su casa, pero alegó que no consideraba que estas prácticas fueran de índole sexual. Una vez arrestado, manifestó a los agentes espontáneamente que masturbaba a los menores en su domicilio y que en agosto uno de los niños le exigió dinero a cambio de mantener en secreto lo que pasaba. El detenido accedió y le entregó 700 euros, según su versión de los hechos.
R.T.
