Unos aseguran que los retrasos son motivo de queja de los vecinos de la zona mientras otros recalcan que está todo planificado debido a una prórroga que, igualmente, afirman que ha sido informada y aceptada por los vecinos.
Partido Popular y Partido Socialista han protagonizado un cruce de declaraciones en el que los matices hacen que la balanza se decante hacia uno u otro lado, pero en el que solo hay una conclusión clara: Triana debe seguir esperando para que el nuevo campo de fútbol 11 de césped artificial de última generación proyectado en el Charco de la Pava sea una realidad.
En este sentido, desde el Grupo Popular del Ayuntamiento de Sevilla denunciaron ayer un retraso en las obras que, según ellos, ha sido denunciado a su partido por parte «de los vecinos». «La obra de construcción del nuevo campo de fútbol de césped artificial debía haber estado concluida en marzo de 2019», ha detallado el concejal popular Ignacio Flores, por lo que no ha dudado en «exigir» la reanudación de unas obras por las que desde el PSOE «sacaban pecho». Al mismo tiempo, desvelan que la situación de la empresa adjudicataria, en concurso de acreedores, es el motivo del retraso, por lo que piden a David Guevara, delegado de deportes, «mayor implicación para que las obras se reanuden».
Precisamente la situación de la empresa encargada de los trabajos es el motivo por el que el PSOE defiende que los retrasos no les pillan por sorpresa, siendo, de hecho, todo parte de una concesión del Ayuntamiento a la empresa para prorrogar los trabajos, habiendo avisado a los vecinos en la última Junta Municipal del Distrito de la situación. «La empresa, a requerimiento del IMD a principios de marzo, nos trasladó el cambio de socios en la empresa y se comprometió a retomar la obra en cuanto se aclarara su situación financiera». Un problema que «ya conocen los vecinos y vecinas, las asociaciones de comerciantes y el PP, dado que de este asunto ya se informó en la última Junta Municipal del Distrito Triana», ha explicado David Guevara, quien ha acusado a Ignacio Flores de querer «enredar a los vecinos». El motivo de la prórroga, defienden desde el Ayuntamiento, responde al interés de acabar las obras cuanto antes, ya que de resolverse el contrato habría que empezar todo el proceso de adjudicación desde el principio y eso supondría mayores retrasos.
Estuvieran previstos o no, respondan a un fin más o menos justificado, lo cierto es que el nuevo campo de césped artificial en el Charco de la Pava aún no es una realidad ni, por el momento, se sabe cuándo lo será. Mientras unos se enredan entre acusaciones y explicaciones, Triana sigue esperando.
R.T.
