Se llama picudo rojo (rhynchophorus ferrugineus) y es un escarabajo asiático tropical que está atacando a las palmeras sevillanas. De hecho, se estima que este coleóptero ya ha terminado con la mitad de las palmeras de propiedad privada en tierras hispalenses.
Y es que muchas de las palmeras (sobre todo las canarias) han debido ser cortadas para prevenir el crecimiento de la plaga. El picudo rojo ataca el interior del tronco y su presencia en Sevilla no es nueva. De hecho, en el año 2008 ya se estudiaron un conjunto de acciones preventivas para preservar las palmeras, pero estas medidas no fueron aprobadas entonces por falta de presupuesto. Desgraciadamente la plaga se liberó a partir de entones de forma vertiginosa y hoy ya es de lo más normal ver palmeras ‘deprimidas’ por Sevilla.
Así las cosas, actualmente se está llevando a cabo un calendario de actuación para su exterminación. En Sevilla se han catalogado 2.500 ejemplares públicos y otros tantos privados. En una primera fase se hizo un tratamiento específico de las palmeras más emblemáticas y patrimonialmente más valiosas, en detrimento de aquellas que se encontraban en zonas periféricas o fueran de menos edad.
En la segunda fase, que lleva ya un año en marcha, se ha firmado un contrato de conservación que se prolongará durante cuatro años y en el que se han definido seis zonas de actuación, cuatro urbanas y dos forestales. Cabe destacar que casi todas las palmeras afectadas están en la zona urbana. Por ello, los técnicos del Servicio de Parques y Jardines están realizando estas tareas divididas en cuatro núcleos urbanos y que están encabezadas por el Casco Antiguo, Triana, Los Remedios y La Macarena. Se tratarán hasta un total de 200 ejemplares en este primer lote.
Posteriormente, se tratarán 300 ejemplares pertenecientes a los distritos Nervión, Sur, Palmera Bellavista y Cerro Amate; 200 ejemplares de los distritos San Pablo y Norte y por último 500 ejemplares del distrito Este, Alcosa y Torreblanca.
R.T.
