Encara el Triana una comprometida visita a Guillena (domingo, 11:30 horas) con la necesidad de sumar para borrar cualquier rastro de nerviosismo tras la mala imagen ofrecida el pasado fin de semana ante el Pedrera (o-3) y alcanzar así los ocho puntos, una barrera psicológica que cambiaría el patrón de objetivos inmediatos de los de Juanma Prado, deseoso de continuar en la línea que está ofreciendo el equipo fuera de casa para posteriormente afrontar con mayor tranquilidad los encuentros en el Charco de la Pava, el auténtico talón de Aquiles para los rojinegros en lo que llevamos de temporada.
El conjunto trianero se sitúa actualmente en la decimotercera posición de la tabla con 5 puntos, justo en la frontera del descenso, una barrera que debe dejar muy a sus espaldas lo más pronto posible. Enfrente le espera un Guillena venido a menos en este comienzo de campaña pues tan sólo ha sumado un empate en los cinco encuentros disputados hasta el momento, por lo que el resto los cuenta por derrotas. Sin embargo, el Triana no espera un partido ni mucho menos sencillo ya que a los anfitriones se les presume un mayor potencial que el que están demostrando en este arranque de curso.
Además, el choque contará con el hándicap del terreno de juego en un campo de césped natural que no se espera en buenas condiciones tras las lluvias caídas a comienzos de semana en la provincia. Así las cosas, a los rojinegros les aguarda un partido feo, tosco y complicado ante un rival aguerrido que siempre pone las cosas difíciles en su feudo, un conjunto en el que no destaca ninguna individualidad pero que sí tiene buena impronta como colectivo y se le presume un buen criterio a la hora de elaborar jugadas de contragolpe. Ni mucho menos se trata de un equipo que tenga como objetivo la permanencia.
En filas trianeras, todo el ímpetu pasa por sacarse la espina de la semana pasada. Los de Juanma Prado han hecho piña y son totalmente conscientes de que no se puede volver a repetir la imagen de la pasada semana, por lo que la meta ahora es ganar esa ansiada tranquilidad para los partidos de casa apoyándose en una victoria fuera, donde los resultados están siendo más convincentes hasta el momento.
Sin altas con respecto a la semana pasada, siguen lesionados Alberto y Campos y ahora se le añade Remesal y Álvaro Jiménez, este último por una contractura en el cuello.
En cuanto a un posible once, el técnico trianero apostaría por los siguientes hombres: Miguel Ángel en portería, línea de cuatro en defensa con Roberto, Rafa, Álvaro Vázquez y Alfonso; Toni y Juanjo en el doble pivote; Jairo en banda derecha, Fran Comas por la izquierda, Luis Prado de enganche y Borja como referente ofensivo.
J.M.C.
