Tras la petición de una vecina, y clienta de la frutería, para homenajear a Cristóbal Romero con un azulejo en el mercado, la Junta Municipal de Distrito aceptó la propuesta por unanimidad y ayer se hizo realidad.
El azulejo en su memoria se ha instalado en el puesto que actualmente regenta su hija y que, en su momento, habitó Cristóbal con una sonrisa y alegría constantes, dos características que quienes lo conocían coinciden en resaltar. Entre otros logros que se le agradecen desde el Mercado es que, junto con algunos compañeros, lucharon y consiguieron el aparcamiento del que actualmente goza el Mercado de Triana.
Al homenaje no faltaron ni su familia ni Carmen Castreño, la delegada del distrito Triana, que acudió para destapar e inaugurar oficialmente este merecido homenaje.
R.T.