Con una enorme presencia policial, con el párroco dando explicaciones, con grupos ecologistas intentando evitarlo (incluso subidos al ficus durante horas), con el Ayuntamiento explicando sus motivos, con expertos que dicen lo uno y lo contrario… Con mucha polémica, el ficus centenario de San Jacinto pasará a ser historia de Triana.
Con mucha polémica, tras años de disputas y algún que otro accidente, este 17 de agosto ha comenzado la tala del ficus de San Jacinto, trabajos previos a su tala, ya inevitable. Defienden los activistas que, de este modo, el párroco se sale con la suya, con un empeño por el que lleva luchando desde 2017, según dicen, con engaños y con una falta de mantenimiento que desembocara en lo inevitable. «No existe un informe técnico que avale la tala como única opción», defiende a pie de árbol los activistas, indignados ante la tala.
La tala acelerándose tras desalojar a los activistas.
No dejen de escuchar esto.
Sepan al menos quién es @antoniomunozsev pic.twitter.com/mZT4A3kInG
— salvatusarbolessevilla (@salvatusarboles) August 17, 2022
Pero desde la Parroquia de San Jacinto no se quedan callados y defiende su parte. En este sentido, defienden que «fueron los partidos políticos y asociaciones de Triana en la junta de distrito quienes dieron el visto bueno al proceso con 18 votos a favor». «La peor decisión fue plantar este tipo de árbol en este lugar, ignorando la evolución que hoy conocemos y que se ha convertido en un cáncer que crece de forma desmesurada», aseveran en un comunicado, en el que avisan: «Nadie puede asegurar que siga creciendo y se puedan seguir desprendiendo ramas que puedan ocasiones nuevas desgracias». Y en eso se amparan para su tala.
Y para ello cuentan con el apoyo del Ayuntamiento, que también ha dado sus explicaciones, muchas, ante una decisión que temen les pueda pasar factura política. Así, el portavoz del gobierno municipal, Juan Manuel Flores, ha recordado que la autorización llega tras la existencia de informes técnicos que alertan sobre el riesgo para las personas en una zona de gran tránsito peatonal y en la que ya se han producido episodios previos de caídas de ramas que en una ocasión provocaron heridas a seis personas, una de ellas de gravedad.
Igualmente, el portavoz del gobierno municipal ha explicado que “la Iglesia, además, nos presentó un informe sobre los daños estructurales en el edificio por el árbol que indica desplome en la fachada y grietas en el interior del templo. El árbol es de titularidad privada, la Iglesia nos ha demostrado con informes que es la única opción para garantizar la seguridad. Entendiendo las protestas, la Iglesia determina que no hay otra opción debido a los riesgos que entraña para las personas y para la estructura del edificio”, ha explicado el portavoz.
El propio alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, ha salido al paso a través de Twitter con un hilo lamentando lo ocurrido y dando sus propias explicaciones:
Hoy es un día triste. Nadie deseaba llegar a esta situación, pero compartimos la preocupación de la iglesia y respetamos su decisión técnica sobre el ficus de San Jacinto dado el gran riesgo para los viandantes y la estructura del edificio.
La seguridad es prioritaria. ⤵️
— Antonio Muñoz (@antoniomunozsev) August 16, 2022
Así las cosas, lo único cierto es que desde hoy Triana cuenta con un vecino menos en San Jacinto, con un polémica de la que seguramente no se ha escrito el último capítulo y con una tala que se ha convertido en tema nacional en pleno mes de agosto.