Parece que el verano ha sentado bien tanto al distrito como a los representantes de asociaciones y partidos políticos que se reúnen mensualmente en la Junta Municipal de Distrito Triana. En esta primera Junta de septiembre la tónica fue la aprobación de todas las propuestas por unanimidad de los presentes, excepto una que solo tuvo un voto en contra. Triana al día estuvimos allí y ahora os traemos todas las medidas que se llevarán a cabo en nuestro barrio.
Tras la aceptación del acta de la Junta anterior, la Asociación de Vecinos Triana Norte comunicó sus dos propuestas: La reparación de la valla de la calle Doctor Jerónimo Pou y el pintado del paso de cebra existente en la calle Farmacéutico Murillo, en su esquina con la calle
Marianillo. Ambas aprobadas por unanimidad.
En el turno de la Asociación Cultural Haza del Huesero, del Turruñuelo, el punto central fueron los alcorques.
«Ante el estado que presentan algunos alcorques de las calles Juan de Pineda y Mosquera de Figueroa, tenemos a bien solicitar: Que se reponga los naranjos de los siete puestos vacíos que existen entre las dos calles, así como el adecentamiento y cuidado de los ya existentes», puntualizó su portavoz.
Medida que también fue aceptada por unanimidad y a la que el portavoz del grupo municipal popular señaló que «al igual que el año pasado, en el mes de noviembre se llevará a cabo la siembra, por parte de los técnicos de parques y jardines».
Desde el Centro de Día de Triana, la portavoz tras reunirse con los vecinos, trasladó a la Junta la petición de mayor frecuencia de los operarios de Lipasam en la calle Nuestro Padre Jesús Nazareno. Tal y como explicó «es una calle peatonal por donde el servicio de limpieza no pasa con tanta frecuencia como por las calles abiertas al tráfico. Debido a que muchos dueños sacan a sus perros a hacer sus necesidades en la misma calle, esta ha tenido un aspecto espantoso este verano», se lamentó la portavoz.
Por su parte, el grupo municipal socialista se mostró preocupado por el estado de dos enclaves del barrio. La calle Arnao de Flandes y el Barrio de Santa María. Por ello, en primer lugar pidió una señal de dirección obligatoria en la esquina de dicha calle con Ronda de Triana hacia Arnao de Flandes, desde el fondo de saco de vehículos del Núcleo Baleares.
«Desde este salen hacia Ronda de Triana y los que vehículos que entran desde Ronda de Triana hacia Arnao de Flandes se pueden producir accidentes».
Seguidamente propusieron el arreglo de la calzada en los cruces de Mosquera de Figueroa y Juan de Pineda «ya que se
encuentran bastante deteriorados», la colocación de marmolillos en las esquinas con Juan de Pineda y Mosquera de Figueroa «ya que
en algunos casos aparcan en dichos lugares con el perjuicio para los peatones» y la colocación de marmolillos frente al número 17 que no existen.
Con respecto al barrio de Santa María, tras la aprobación se llevará a cabo la reparación integral de la calle peatonal ya que está bastante deteriorada y se producen inundaciones en los garajes existentes debajo de esta, la colocación de señal de velocidad máxima a la entrada de la calle Fray Tomás de Berlanga «ya que algunos vehículos circulan con mucha velocidad y pueden producir accidentes» y el arreglo de la calzada del cruce de Virgen de las Torres con Fray Tomás de Berlanga y la salida de la calle peatonal ya que se encuentra bastante deteriorada.
Finalmente la única propuesta que no fue aprobada por unanimidad, fue la presentada por el grupo municipal popular en referencia al parque situado en el CEIP Juan Ramón Jiménez «acondicionar este espacio de ocio para los vecinos del barrio ya sea a nivel de seguridad, mobiliario infantil, etc.». Tal y como explicó el portavoz, piden que estas modificaciones frenen el vandalismo y la existencia de jóvenes haciendo «botellón». La idea fue apoyada por todos, excepto por Izquierda Unida que tildó la propuesta de «demasiado general» y abogó por «medidas más concretas para ese espacio».
Laura Liñán
