Muchas dificultades tuvo el Balonmano Triana en este inicio de la segunda vuelta de la competición para seguir sin conocer la derrota. Un mal partido ante el colista de la categoría, que solo lo salva el resultado final.
Llegaban los trianeros a la localidad cordobesa de Palma del Río como líderes destacados, y ante un HispanoServis que ocupaba la última posición de la tabla, lugar que no les corresponde por el juego que realizan y, quizás, esta diferencia hizo que la tensión para disputar el partido no fuera la adecuada. El frío ambiente que reinaba en El Pandero, la falta de entrenamientos previos tras el parón navideño y un inicio de 0-4 en el marcador, fueron suficiente para que la relajación apareciera en los visitantes y esto les pudo costar caro.
El inicio del partido empezó con la portería trianera parando todo lo que llegaba a ella, lo que valió para que, a los 10 minutos, el marcador reflejara un 0-4. Desde entonces, el equipo se desdibujó y, en un toma y daca con poco sentido del equipo de Jorge Caro, llegó en el minuto 20 al empate en el marcador (7-7). En los últimos diez minutos de esta primera parte, el equipo encontró más el equilibrio en ataque y defensa. Además, los trianeros consiguieron dos tantos de diferencia, con los que se alcanzó el descanso (12-14).
La segunda parte comenzó como la primera, con una portería que realizaba paradas de mucho mérito, lo que llevó a poner tierra de por medio, alcanzando una diferencia de siete goles. Sin un gran juego en ataque, se conseguía alcanzar la portería rival pero el equipo no mantenía la tensión adecuada, ni en defensa ni en los ataques, llegando al minuto 50 con cuatro goles de diferencia (21-26). A partir de aquí, una defensa individual del HispanoServis, que creó multitud de pérdidas de balón a los nerviosos jugadores del Balonmano Triana, alcanzándose el resultado final de 30-31.
Dos puntos más que lo consolidan en la primera posición de la tabla y lo mantienen como el único equipo de Segunda Nacional sin conocer la derrota.
B.T.